jueves, 5 de mayo de 2011

unas cuantas fotos más




Hace tiempo que tampoco escribía yo y eso que al ser contribuyente debería hacerlo más a menudo, pero hay que ver la ocupación que da tener un niño pequeño. Entraré aunque sea para colgar fotos de Raúl porque tengo muchísimas y seguro que muchos de vosotros no tendreis las mismas que yo, de esta manera las comparto con todo el mundo que pertenece a este blog.
Aunque todavía no estamos a 10 de Mayo, quedan pocos días para ese maldito dia que hará justo un año que en el hospital nos dieron la peor noticia de nuestras vidas.
Vicky,si este es un rincón para compartir el dolor, permiteme a mí también que lo haga:
Ese trágico día estaba yo con mi madre en el hospital y fue la psicologa la que nos dijo aquello tan cruel. Yo estaba a punto de dar a luz y creía que me desmayaba allí mismo, recuerdo que fui a buscar corriendo al doctor, que muy friamente me espetó un pasa todos los días y con pacientes mucho más jovenes. Fue horrible escuchar esas palabras y fue ahí cuando le contesté : muy bien doctor, espero volver de nuevo aquí y decirle que estaba muy equivocado.
Y ahí empezó nuestra continua lucha sin tregua en busca de hospitales, de alguien que nos diera una esperanza. Día y noche sin parar, buscando. buscando...
Yo por mi parte (ya que cada uno hizo lo que pudo y más) contacté con con paises de habla inglesa y alemana mandandoles informes, pruebas y demás y no me daban mayor esperanza. En Estados Unidos al principio parecían estar dispuestos pero al enviarles las últimas pruebas se echaron hacia atrás. Tan solo había un hospital que parecía al menos, querer intentarlo. Y ahí se intentó hasta el final. Jamás nos dimos por vencidos, nadie, absolutamente nadie. Recuerdo hablar con Mª José y ella querer siempre lo mejor para su hijo y hacer lo que fuera. Que duro para ella, que veía que se intentaba todo y nada surtía efecto. Pero por un hijo todo y así se hizo. MªJosé, sé que lees este blog y desde aquí te mando un beso enorme.

Como he empezado en este blog diciendo, hace un año de aquello. Pero Raúl sigue con nosotros y siempre lo estará. No me cansaré de verte en fotos, querido cuñado y seguiré hablando de tí en este blog que espero no se cancele nunca, por lo menos mientras vivamos y estemos en este mundo de paso. Porque, sin duda, estamos todos de paso. Pero yo sé que cuando llegue a ese lugar me encontraré con los ojos azules más importantes de mi vida: los de mi yaya, los de mi cuñado y los de mi tío Jose. Mientras tanto, iré mirando los preciosos ojos azules del retoño de Raúl, mi sobrinito Álvaro.
Un beso desde éste, tu querido blog.
-Marian-